Cien años de soledad es una novela escrita por Gabriel García Márquez. La primera impresión se realizó el 30 de mayo de 1967 y salió a la venta el 5 de junio. Existen alrededor de 400 ediciones en más de 48 idiomas y se vendieron más de 30 millones de ejemplares. Este año se cumple 58 años de publicación aunque no hubiera sido posible sin el apoyo de su esposa Mercedes Barcha.
La influencia de Mercedes
Mercedes Barcha tuvo una participación fundamental en la publicación de la novela que casi lleva el nombre «La casa».
En El olor de la guayaba, Gabriel García Márquez dijo:
«Sin Mercedes no habría llegado a escribir el libro. Ella se hizo cargo de la situación».
Entre 1965 y 1966, durante 18 meses, Gabriel García Márquez escribió Cien años de soledad. En esta época, la familia se encontraba en una crisis económica. Así que mientras García Márquez escribía sin pausas, Mercedes se encargaba de la casa. Una vez, ella le dijo a su esposo que ya había llegado al fondo. Entonces, el escritor tuvo que empeñar su carro. Pensó que con eso les alcanzaría, pero solo les duró 3 meses.
Nunca faltaba un plato de comida, aunque le debían a todo el mundo. Incluso les faltaba pagar 3 meses de la casa, pero eso Mercedes lo resolvió con el ingenio que la caracterizaba. Un día, el casero la llamó para cobrarle. Ella, rápidamente, le preguntó a su esposo cuando tiempo tardaría en terminar el libro, a lo que él respondió que 6 meses. Entonces ella le dijo al casero «no solo le vamos a deber 3 meses, sino 6 más» y le dio su palabra que en 7 meses pagaría la totalidad de su deuda.
Pero no solo fue importante para mantener su hogar, sino que también para ser su soporte emocional. Cuando Gabriel García Márquez escribió la muerte del coronel Aureliano Buendía fue a buscar a Mercedes. Subió al segundo piso de la casa donde ella estaba y, al instante, Mercedes supo que el coronel había muerto. El escritor sufrió demasiado al terminar el capítulo. Por eso se acostó en la cama y lloró durante dos horas.
Al terminar de escribir, llevaron el manuscrito de 700 páginas. El costo de envío era de 83 pesos, pero ellos solo tenían 45. Entonces, García Márquez partió el libro a la mitad y envió todo lo que pudo. Al regresar a su casa, para poder pagar el envío de la otra mitad del manuscrito a su editor en Argentina, su esposa empeñó las tres últimas cosas que no habían empeñado: el calentador de García Márquez, la secadora de cabello de Mercedes y la licuadora. Recibió 50 pesos y pagaron 48 pesos para enviar lo que faltaba. Al salir del correo, Mercedes le dijo a García Márquez:
«Y me dijo: ahora, lo único que falta es que esta novela sea mala».
El Nobel y la mujer que sostuvo su mundo
Mercedes Raquel Barcha Pardo nació el 6 de noviembre de 1932 en Magangué, Colombia. Fue hija de un boticario, dato que usaría años después para su novela.
Gabriel García Márquez y Mercedes Barcha se conocieron en Sucre en 1941, cuando ella tenía 9 años. Se acercó a ella, 4 años después, en un baile de estudiantes. Le preguntó si podían bailar juntos y después le pidió que se casara con él.
Posteriormente, Mercedes y su familia se mudaron a Barranquilla, escapando de la violencia política. Sin perder el contacto con García Márquez. No dejaron de escribirse cartas mientras él estaba en Europa. Las cuales fueron destruidas años después.
Gabriel García Márquez y Mercedes Barcha
A su padre, Demetrio Barcha, no le gustaba la relación que ellos tenían y le repetía que si se casaban, terminaría ‘comiendo papel’. Al final, se casaron en 1958 cuando él tenía 31 y ella 25. En la iglesia del Perpetuo Socorro de Barranquilla. Ella usó un vestido azul eléctrico y él un traje gris.
Viajaban mucho, a pesar de que al nobel no le gustaban los aviones, y siempre regresaban a Colombia. Tuvieron dos hijos, a los que llamaron Rodrigo y Gonzalo. Estuvieron casados por 56 años hasta que el escritor falleció en 2014.
Mercedes era un mujer silenciosa según las personas de la Fundación Gabo. Siempre demostró un carácter firme y sus amigos comentaban que ella tenía un estricto sentido de lealtad. García Márquez decía, en broma, que ella ‘gestionaba departamento de rencores’. Para los lectores de El amor en los tiempos del cólera, es imposible no pensar que Fermina Daza está inspirada en Mercedes Barcha. Aunque el escritor ha dicho que su esposa es un personaje increíble del que jamás ha escrito.
Mercedes murió a los 87 años, el 15 de agosto en su casa de Ciudad de México.
Aparición de Mercedes en Cien años de soledad
A pesar de no tener una dedicatoria para Mercedes, en el último capítulo (XX) de la novela se menciona un personaje con su nombre.
«Aureliano, que era quien recibía la suscripción, lo ayudaba a llenar los formularios, a veces en su casa, y casi siempre entre los pomos de loza y el aire de valeriana de la única botica que quedaba en Macondo, donde vivía Mercedes, la sigilosa novia de Gabriel».
Edición conmemorativa del libro «Cien años de soledad»
En 1985, en la primera página del libro El amor en los tiempos del cólera, hay una dedicatoria simple, concisa e increíble para ella.
«Para Mercedes, por supuesto».
